Es fácil hacer yogur en casa en grandes cantidades si usas el horno. Os enseño cómo hacer yogur casero sin yogurtera de manera muy sencilla.
Hace años que hago el yogur en casa sin yogurtera.
Cuando hice yogur casero por primera vez fue porque mi marido tenía una yogurtera antigua y quería usarla. Sólo lo hice por curiosidad y por hacer algo nuevo. Lo divertido era hacer yogures de nuevos sabores. Es difícil pensarlo, pero en ese momento me preocupaba más la grasa del yogur que los colorantes y edulcorantes o el azúcar que llevara. De hecho, hacía yogures con leche desnatada y para conseguir un yogur con consistencia, tenía que añadirle leche en polvo.
Las cosas han cambiado mucho. Ahora que he cambiado mi manera de pensar, sólo compro leche entera. Al usar la leche con toda su grasa, el yogur casero sale con una consistencia bastante espesa, incluso diría que tiene la consistencia perfecta.
Dejé de hacer yogur casero durante una época, pero comencé de nuevo cuando mi hijo cumplió 6 meses de edad. Quería empezar a introducirle nuevos alimentos, pero los yogures que comercializan para bebés sorprendentemente están llenos de azúcar y otros ingredientes innecesarios. Encontrar un yogur con toda su grasa sin azúcares ni edulcorantes añadidos era casi imposible. Así que, decidí que lo mejor sería hacer yogur casero de nuevo.
A mi hijo siempre le han gustado los productos lácteos. Le encanta la leche y el queso y se comía el yogur casero tan de prisa que la yogurtera no daba abasto. Necesitaba una manera más fácil de hacer grandes cantidades de yogur.
Resulta que era mucho más fácil de lo que había imaginado. La luz del horno ayuda a mantener el yogur a la temperatura perfecta para hacer yogur. Es muy sencillo de hacer.
Os dejo con cómo hacer yogur en casa sin yogurtera:
Ingredientes
- 1 litro leche
- 1/2 tazas cultivo para yogur (yo usé un yogur griego)
Elaboración paso a paso
- Calienta la leche al baño maría a 185ºF / 85ºC lentamente para evitar que haya grumos en el yogur después.
- Quita la leche del fuego y deja que se enfríe hasta llegar a 110ºF / 43ºC. Puedes acelerar el proceso metiendo la olla en agua fría. Mientras esperas, enciende el horno a mínima temperatura y deja que se caliente durante unos minutos.
- Una vez que la leche se enfríe a 110ºF / 43ºC, puedes añadirle el cultivo de yogur.
- Apaga el horno, pero deja la luz encendida.
- Vierte la mezcla del yogur en los recipientes donde los quieres almacenar. Yo uso frascos de vidrio. Es mejor pasar la mezcla por un colador primero, y así evitas los grumos en el yogur y también fácilmente quitas los restos de la piel que se forma encima de la leche caliente.
- Coloca los frascos con la leche en el horno, y manten la luz encendida. Deja el yogur incubando en el horno durante unas 7 horas.
- Una vez pasadas las 7 horas, retira el yogur del horno y deja que esté a temperatura ambiente. Ya puedes almacenar el yogur en la nevera hasta comerlo.
- Guarda un poco del yogur casero para usarlo como cultivo la próxima vez y así evitas tener que comprar más yogures del supermercado.
El yogur casero hecho con leche entera resulta bastante espeso por si mismo, pero si quieres obtener un yogur aún más espeso, puedes colarlo con un paño de malla cerrada o incluso se le puede añadir un poco de gelatina a la mezcla mientras lo calientas al baño maría para disolverla. Una vez que se enfríe, la gelatina ayuda a espesarlo bastante.
A mi hijo todavía le gusta comer el yogur natural sin azúcares añadido, a pesar de que le han dado variedades azucaradas con sabores. Personalmente odio las variedades azucaradas, no sólo porque sé que son perjudiciales para la salud, sino también porque me parecen demasiado dulces. Para mí el yogur casero es superior en sabor, textura y calidad, y ¡me encanta!
Ahora que sabes cómo hacer yogur en casa fácilmente sin yogurtera, espero que lo pruebes y que te vaya bien.