Entra en calor este invierno con una bebida muy caliente pero sin quemarte con este “cubretaza” fácil que se puede hacer de un calcetín sin pareja en sólo 5 minutos. También puedes hacer un cubretaza con retalles de tela polar u otras prendas de punto.
A estas alturas ya sabes que me encanta reutilizar las cosas en vez de tirarlas si le puedo encontrar uso. También habrás notado que me encantan las infusiones. Incluso te he mostrado cómo se puede hacer infusiones de plantas que se encuentran en la montaña o en tu propio jardín.
Pero también hay cosas que no me gustan como, por ejemplo, quemarme las manos en una taza de té caliente.
Por eso os voy a enseñar como hacer un cubretaza fácil con un calcetín sin pareja.
Como os digo, es un proyecto fácil y divertido y así le puedes encontrar uso a un bonito calcetín sin pareja. Si no tienes ningún calcetín sin pareja, también puedes comprar pares de calcetines baratos y hacer dos; uno para tí y uno para un amigo.
Si no tienes máquina de coser y no quieres hacer ninguna costura, es tan sencillo como cortar y quitarle la punta del calcetín donde pones los dedos de los pies. Para proteger bien las manos, me gusta doblar la tela dejando la parte cortada hacia abajo y doblando el calcetín por encima cubriendo esa parte cortada.
Sin embargo suelo ser un poco perfeccionista y no me gusta como la parte del talón hace un escalón que deja un cubretazas no simétrico. Es algo muy fácil de arreglar y así tienes un cubretazas mejor acabado.
Dejo el borde superior del calcetín intacta y corto en dos sitios quitando el talón y la punta del calcetín, como se ve en la foto. Dale la vuelta a una parte y junta los lados derechos metiendo una parte dentro de la otra. Alinea los cortes y cose por esa línea, dando toda la vuelta al calcetín.
Yo usé la máquina overlock porque deja la costura bien acabado, pero puedes usar la que tengas.
Sólo falta darle la vuelta y ya está. Ya puedes usar el cubretaza. Queda un corte sin acabar, donde quitaste la punta del calcetín, pero al usarlo no se ve porque queda oculto debajo de la otra capa de tela. No se me ha deshilado nunca, pero puedes acabar mejor esa parte con la máquina de coser si te preocupa.
También se pueden usar otros materiales.
Forro polar
El forro polar, al ser elástico, también se adapta a la forma de una taza. Y como es una tela que tampoco se deshila, es perfecto para este tipo de trabajos porque no tienes que coser los bordillos.
En el caso del forro polar, es mejor cortar la tela más ajustada para la taza en que lo vayas a usar, ya que no se adapta tan bien a la forma de la taza como el calcetín.
Para ajustarlo bien, puedes hacer un patrón con un trozo de papel o servilleta sacando las medidas de altura y anchura necesarias.
Lo corto justo, sin añadirle más tela para las costuras, para que se tenga que estirar un poco al colocarlo y así se queda bien en su sitio.
Si la tela tiene lado derecho, hay que doblarlo juntando los lados derechos y cosiendo por el lado formando un tubo. Después de coserlo, puedes cortar la parte inferior para dejarlo recto. Debido a que el forro polar no se deshila, no hay que hacerle dobladillo. (El dobladillo superior que se ve en mi foto ya estaba en el trozo de tela que usé y lo dejé así.)
También se puede hacer cubretazas de otros materiales como las mangas de un suéter o una vieja gorra de punto, pero como esas telas sí que suelen deshilarse, es necesario coser donde cortas la tela para que no se dehile. He usado la manga de un suéter para hacer un cubretazas, y salió bastante bien, pero depende mucho del grosor del hilo y el tamaño del punto del sueter que quieres usar.
Para mí, lo más fácil y lo que mejor sale es el calcetín, pero me gusta reciclar lo que pueda.
¿Qué vas a usar tú?
Me encantaría ver lo que hagas.
susanna
muy chuloo!!gracias